Intentaré dar mi opinión sobre una pregunta que los viajeros me hacen muy a menudo: realmente, ¿merece la pena ir a Ushuaia? A la hora de planificar un viaje a Argentina (así como a Chile), Ushuaia es por supuesto un lugar que despierta nuestra atención y nuestra imaginación. Nicolas Hulot (entre otros) tiene mucho que ver en ello a través de su programa de televisión «Ushuaïa Nature».
Para ir a Ushuaia, sistemáticamente hay que desviarse. ¡Hay tantas cosas que ver en Argentina ! Como en Chile, que hay que contar los días durante una estadía. Entonces Ushuaia, ¿sí o no? Como suele ocurrir aquí, es difícil responder categóricamente. Todo dependerá de algunos factores…
El primer elemento determinante, aquí más que en otros lugares, será el tiempo del que dispongan. Navegar por el Canal Beagle, bajo un gran cielo azul y una ligera brisa, hará las delicias de los más escépticos. Además, la llegada a Ushuaia no dejará indiferente a nadie. Ya sea por aire, mar o carretera, ¡la emoción seguramente los abrumarán!
Ushuaïa es el fin del mundo, un pueblo construido en un lugar de gran belleza: la bahía que lleva el mismo nombre. El entorno es absolutamente suntuoso, sobre todo cuando el tiempo lo acompaña.
Otro elemento importante: el período de su visita. Efectivamente, su percepción no será la misma si viene a Ushuaia en temporada alta, o completamente fuera de temporada. En pleno verano austral, desde mediados de diciembre hasta finales de febrero, numerosos cruceros navegan por el Canal de Beagle. Miles de turistas llegan a Ushuaia durante este período. Entonces, la «invasión turística» y las idas y venidas de barcos podrían molestarlos.
El tercer elemento importante será simplemente la idea que tenga el viajero antes de dirigirse allí. Si Ushuaia evoca un pueblito rodeado de tierras desiertas, azotado por los vientos, habitado por gente muy típica, entonces se llevarán una gran decepción, porque los descendientes de los nativos han sido casi todos diezmados.
Ushuaia es un gran pueblo de más de 100.000 habitantes que sigue creciendo de forma un tanto anárquica. En cuanto a paisajes, no son impresionantes como en otros lugares de la Patagonia. Pero hay allí una atmósfera que sigue siendo especial, los cielos, por ejemplo, son incluso más bonitos que en otros lugares.
Finalmente y sobre todo, el elemento principal dependerá de su programa, de la calidad de las excursiones y de los guías que los ayudarán a descubrir el fin del continente sudamericano. Ushuaia es la puerta de entrada a la Antártida, el lugar más salvaje y magnífico del mundo, sin comparación posible. Un crucero por la Antártida también es una buena razón para ir a Ushuaia.
Ushuaia es también el Canal Beagle con la Isla Navaro (chilena) justo enfrente. Es el fin del mundo sin poder observar el horizonte. El Canal Beagle es refugio de fauna marina muy fácil de observar. Uno de los mejores lugares del continente para observar lobos marinos y pingüinos.
Ushuaïa también evoca al Parque Nacional Tierra del Fuego, donde se pueden realizar muchas caminatas. También es una región llena de bosques y lagos. Profundizando en Tierra del Fuego, hacia el Norte o hacia el Este, se pueden visitar verdaderas estancias donde las condiciones de vida son difíciles por las condiciones climáticas. Ushuaia, y Tierra del Fuego, es también una parte del mundo donde se encuentran las truchas más grandes del mundo y donde los albergues de pesca son mundialmente reconocidos.
Además Ushuaïa es simplemente legendaria, y como todas las leyendas, hay un elemento de imaginación que se debe tener. Déjense llevar, sueñen y pónganse en la piel de los pioneros… estas son las claves para dejarse conquistar.
Así que, si les gustan las leyendas, no lo duden más… ¡vengan a Ushuaia!