Para los amantes de las civilizaciones lejanas y de las leyendas épicas, le propongo circuitos personalizados enfocados en el descubrimiento de culturas antiguas y de sus ritos.
Desde la tan misteriosa civilización de la Isla de Pascua, hasta la cultura de los Incas palpable en el Noroeste argentino, pasando por la fuerte identidad del Pueblo Mapuche en Patagonia y los indios Yámana en Tierra del Fuego, las leyendas, los misterios y otros descubrimientos no faltarán para darle ritmo a su viaje. He aquí algunos ejemplos de descubrimientos de culturas antiguas que les propongo. Existen otras posibilidades en otras regiones que las que presento a continuación.
Comunidades Guaraní de Argentina
El pueblo Guaraní
Los Guaraníes, pueblo de Misiones, al Noreste argentino. Todas las comunidades Guaraníes, recorrían los pueblos o «tekuas» en idioma guaraní, predicando el mensaje de la llegada de profundos cambios. Pero estos pueblos se enfrentaban entre ellos en una permanente búsqueda del Estado de Aguyé, y practicaban el canibalismo entre ellos. Estos karaí no formaban parte de ningún pueblo en particular, pero eran Panguaranís. Su mensaje era unificador.
Cien años más tarde, con la invasión española, llegan los jesuitas cuyo mensaje cristiano rivaliza directamente con el de los Karaí. A pesar de ser extranjeros, también traían un mensaje unificador. Los Guaraníes que aceptan vivir con ellos son automáticamente protegidos por las leyes del poderoso rey de España.
Simultáneamente, la expansión constante del frente hispano-portugués y la amenaza real de la esclavitud que aquello representaba, llevó a un gran debate interno entre los jefes guaraníes y los partidarios de la alianza jesuítica, de manera a obtener la protección de la corona, los «duros» preferían el enfrentamiento. Serán entonces los jesuitas aquellos utilizados por los guaraníes para mantener su modelo y modo de vida. Finalmente, el modelo político guaraní estaba listo para ser ocupado por los jesuitas.
Civilizaciones Incas de Argentina
Los Valles Calchaquíes
Les propongo recorrer una parte del camino de los Incas desde Las Ruinas de Quilmes hasta la Quebrada de Humahuaca. Este sitio es el más importante de la civilización Inca en Argentina. De una extrema belleza, se encuentra al sur de los Valles Calchaquíes, un lugar increíble de 520 km de largo. Además, estos valles y montañas forman paisajes considerados como los más bellos de Argentina.
Los Calchaquíes, una alta cultura indígena, mantuvieron una guerra de 100 años contra las invasiones españolas conocida como las guerras Calchaquíes. La Quebrada de Humahuaca es una zona árida, de una enorme belleza de paisajes y culturalmente muy rica: Purmamarca, donde se encuentra el Cerro de los Siete Colores, Maimará, Tilcara y Humahuaca.
La Quebrada fue declarada Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad en julio de 2003 por la UNESCO, gracias a sus paisajes maravillosos y pueblos que supieron conservar los numerosos vestigios precolombinos y coloniales. Puedo organizarles un circuito de varios días.
Comunidades Mapuches de Argentina y Chile
El pueblo Mapuche
Durante su viaje a Argentina y/o Chile, tendrá seguramente la ocasión de acercarse a diferentes comunidades mapuches. Los Indios Mapuches viven principalmente en las zonas rurales de la región de Araucanía así como en la región de los Lagos y la región Metropolitana (dicho de otro modo, la capital, Santiago de Chile).
Originarios de los Andes chilenos, han propagado su cultura a través de las tribus Het y Tehuelches, de la Pampa a la Patagonia argentina, entre los siglos XVIII y XIX. Ni los Incas ni los conquistadores han logrado someterlos.
Alrededor de 1880 en Argentina y Chile se llevaron a cabo guerras de conquista contra los Indios Mapuches y Patagones, que vivían al Sur del continente en las regiones sin control y difícilmente penetrables.
Culturas antiguas de la Isla de Pascua
Moai y la Isla de Pascua
La Isla de Pascua es una isla de Chile. Toma su nombre gracias al explorador holandés: El almirante Jacob ROGGERCEN que la descubrió la noche del domingo de Pascuas (el 5 de abril de 1722). La nombró PASSCH EYLANDT literalmente: Isla de Pascua.
Hay alrededor de 300 Moai en la Isla de Pascua, pero esta cifra puede variar considerablemente en función de los diferentes estudios, entre ellos los estudios relativos a la tierra, los que aun no han sido concluidos, los descartados y los enterrados. De hecho, muchos de ellos fueron masacrados durante las múltiples guerras tribales que marcaron la historia turbulenta de esta pequeña isla barrida por los vientos y las olas.
La materia prima de estas gigantescas estatuas que cubren la isla, es principalmente el basalto, que proviene del volcán Rano Raraku cuyo cráter está hoy invadido por los juncos.
La función de los Moai sigue siendo hoy un misterio. Algunos ven en ellos funciones religiosas: estatuas esbozadas en honor a los dioses, ídolos gigantescos dedicados a la plegaria y a la adoración. Estas estatuas tenían, quizás el rol de proteger a los habitantes de las guerras, de los extranjeros, de los espíritus malvados, del clima; todas las hipótesis que respaldan la teoría de la protección son posibles. ¿Estarían allí para cuidar a la isla? ¿O se trata de monumentos en honor a los muertos? Lo que importa saber es que todas están enfrentando a la isla, de espaldas al mar. Existe, sin embargo una excepción, es el Ahu Akivi, un alineamiento de 7 Moai que miran hacia el mar, dirigidas al cielo, se les conoce como «las que miran las estrellas».
Ellas han generado muchos interrogantes ya que no tienen las características físicas de los polinesios. Tienen narices aguileñas, labios finos, frentes altas y barba. Es por eso que muchos piensan que la isla ha sufrido olas migratorias, una de ellas de Polinesia y la otra de América del Sur, probablemente de Perú. Además, el rodete rojo podría simbolizar un color de cabello rojizo rasgo común entre algunas de las tribus sudamericanas.
Huellas indelebles de la cultura precolombina
Camino de los Incas
El territorio de Salta fue habitado por poblados de diferentes orígenes desde los tiempos de la cultura precolombina cuya influencia se siente todavía hoy muy presente. Alrededor del año 1000 a.c se instalaron pueblos agrícolas, pastores y alfareros.
En el siglo XV, la región es dominada por los Incas y el territorio forma parte de Collasuyo, una de las cuatro regiones – en las cuales el Imperio Inca estaba dividido – conocida como Tahuantisayo. La influencia del Inca fue remarcable en diversos aspectos, imponiendo siempre su propio idioma: el Quechua.
Existe una red importante de caminos incas en el Valle Calchaquí y en «La Puna». Entre las montañas podemos encontrar varios senderos que zigzaguean y que antiguamente formaban un vasto entramado rutero que permitía la comunicación en todo el imperio. Varios de ellos conducen a los Santuarios que se encuentran entre las altas cimas andinas y visitándolos se obtienen ¡unas vistas de paisajes magníficos!
Arqueología de los Andes
Los niños de Llullaillaco
En marzo de 1999 se produce uno de los encuentros más importantes en la historia de la arqueología de alta montaña; se trata de momias de tres niños pertenecientes a la civilización Inca, enterrados junto a un centenar de diferentes objetos. Este hallazgo arqueológico tuvo lugar en la cima del volcán Llullaillaco, a 6.700 m de altitud.
Se trata de un importante «Santuario de altitud» donde se llevaba a cabo un ritual llamado «Capucocha». Este hallazgo puede ser conocido y visitado en el Museo de Arqueología de Alta Montaña (MAAM) que se encuentra en el centro de la ciudad de Salta al Noroeste argentino; ofreciéndonos un viaje de 500 años para ver, comprender y experimentar una cultura siempre presente.